Se trata del n-ésimo incidente de seguridad que sufro. Esta vez parece que no por mi culpa, pues ha sido un ataque generalizado mediante acceso SSH a todo un subconjunto de servidores de mi proveedor de hosting (los iniciados ya sabrán, por tanto, de que hosting se trata, pues han corrido ríos de tinta con el dichoso incidente).
La WEB ha permanecido durante un par de semanas más tiempo en modo mantenimiento que abierta, debido a algunos imprevistos que surgieron a raíz del reseteado que, por seguridad, efectué (tan sólo el correo, por razones obvias, ha permanecido operativo durante todo ese tiempo) .
Es el precio que tenemos que pagar los que no queremos que el Tío Sam o Mao Tse Tung (Mao Zedong para los amigos) se hagan con el control de nuestros datos: si los quieren, por lo menos, que los tengan que buscar, no voy a ir yo a su casa a llevárselos ...